El objetivo de este blog es revelar a la luz de LAS 7 LEYES DE LOS NEGOCIOS ALTAMENTE EXITOSOS, las razones de porque las empresas se estancan, no avanzan, no crecen, no cumplen las metas o no van a la velocidad que se quiere. El éxito de una empresa no solo depende del éxito de su producto o servicio, obviamente es indispensable desde su concepción costo-beneficio, es decir valor, hasta su empaque y comercialización,
sin eso no hay negocio. Pero tampoco hay negocio sino se cuenta con el soporte de las dos cadenas de valor como sistemas de autovalencia, sin estas no sería posible la viabilidad ni proyección de la empresa en el tiempo. Como sabemos, todas las organizaciones tienen dos cadenas de valor, la primera la gestionable por las personas, la de las cosas, la segunda la medible, la de la información.
El futuro de una empresa se va construyendo con constancia, disciplina y balance de las tres dimensiones o “tridimensiones” de los negocios. Estas son; producto-ejecución-administración. Cada una de estas dimensiones tiene un valor intrínseco en el tiempo, es así como el producto está conectado con el futuro, la ejecución con el presente y la administración o gestión con el pasado. Futuro porque es la visión del negocio, es la innovación y creatividad. Presente porque es la agenda diaria que se requiere para desarrollar la misión. Pasado porque es la experiencia, la observación y el análisis necesario para entender y gestionar.
El hecho que alguna de estas “tridimensiones” no sea atendida de la forma debida, nos lleva a la ZONA CERO, a la zona de los problemas y la espiral negativa que no trae nada bueno. No balancear las dimensiones, nos lleva a no cumplir con las leyes de los negocios. Y un eslabón débil hará toda la cadena débil.
Nunca dejamos la dimensión PRODUCTO de lado, pues es demasiado importante para nuestro corazón y chequera, pero a lo mejor no le dedicamos el tiempo suficiente para darle una perspectiva de mayor valor. La dimensión EJECUCIÓN es nuestro dolor de cabeza, pues son los problemas del día a día, y por lo tanto queda menos tiempo para la primera o la tercera “tridimensión”. ADMINISTRACIÓN o GESTIÓN es la más sacrificable, pues no vemos sus beneficios en forma inmediata, más bien vemos solo costos y tiempo que no tenemos.
Las “tridimensiones” son importantes y necesitamos de las tres para no caer en la ZONA CERO. La pregunta que queremos resolver es como las balanceamos. Para eso hay que empezar por redefinir prioridades, construir un equipo y leer nuevamente las 7 leyes de los negocios altamente exitosos.
LA ZONA CERO ES DONDE LOS PROBLEMAS TIENEN SU ORIGEN
Ninguna empresa debe dejar de incluir en su agenda este código de los negocios, sin la pena de costos y riesgos aumentados. Repasemos las leyes:
1era Ley - Construir y Crecer: Es la ley que mira al futuro y le da sentido a las empresas, sin crecimiento no es posible pensar en futuro. Es el fruto de cumplir las 6 leyes que siguen, ruta obligada para llegar a pensar y entender como llevamos el modelo de negocio a un nivel superior. Es el arte de asegurar valor para todos y si no has pasado por las leyes anteriores, esta ley será letra muerta.
2da Ley - Adaptar: Sin dudas es la parte innovadora y creativa que toda empresa debe considerar dentro de su ADN, porque es el modelo de negocio y como todo, tiene que ir con los tiempos y movimientos, nada es estático. Es el alma de toda empresa, le da vida y sentido a la misión. La adaptación es cambio y valor, es competencia y diferenciación, es el resultado de aprender y preguntar.
3era Ley - Aprender: Los errores son inevitables y aquí se incluyen todos los errores y desviaciones, de los que hay muchos y de todo tipo, nivel, impacto y costo. Los errores son la muestra de que avanzamos aunque nos desviamos de la ruta. Lo importante es darse cuenta, corregir y aprender. Estos son los cinco pasos deseables para crecer a pesar de cometer desaciertos: 1) Equivocarse barato 2) Darse cuenta de que se cometió un error 3) Pedir perdón a quien salió perjudicado 4) Aprender 5) Evitar cometerlos de nuevo.
4ta Ley - Enfocar y Dirigir: Enfocar la atención ayuda a dirigir esfuerzos. Hacer lo importante y delegar lo urgente. El concepto central que utilizamos al amparo de esta ley es “Foco-Foco-Foco”, siendo siempre fieles a una meta, que no nos quite flexibilidad ni maniobrabilidad, pero que oriente nuestra toma de decisiones.
5ta Ley - Planear: Preparar a la dirección para conectarse más tiempo con el futuro combinando con la experiencia del pasado. Las metodologías de planeación fueron hechas para empresas consolidadas donde un cambio de timón significa un gran esfuerzo y recursos, sin embargo para una PYME el tamaño es su fortaleza, y la cultura puede ser su debilidad. Hacer como hace un carpintero es un must do, medir dos veces antes de cortar.
6ta - Preguntar: Que el líder sea curioso y cuestionador, que no funcione a prueba y error, más bien que aumente su conciencia, control y accionar. Cuando se hacen las preguntas correctas, las respuestas son evidentes, es decir, lo difícil es hacer una buena pregunta porque las malas respuestas abundan.
7ma – Gestionar información: Siempre hay información, pero puede suceder que haya información transaccional no procesada (ausente) o información parcialmente mal procesada (sesgada), ninguna de las dos ayuda a la gestión, más bien al contrario, aumenta el riesgo de tomar decisiones erradas, confundir a la gente, no aprender ni avanzar. Dirigir una empresa exige tener información útil y al día, así como al personal informado.
Para estas leyes el orden de los factores si altera el producto, en otras palabras, estas leyes no están en un orden al azar, tienen una secuencia lógica.
1) La primera necesidad de una empresa es crecer para asegurar el futuro que es donde se encuentran las metas.
2) Para crecer se necesita adaptar porque nunca nos quedamos con la primera versión.
3) Para adaptar necesitamos aprender, sin aprendizaje no es posible mejorar.
4) Para aprender es indispensable enfocar el esfuerzos y decisiones.
5) Para enfocar necesitamos planear y poner en orden las ideas en un modelo de negocio.
6) Para planear no queda más que hacer las preguntas inteligentes.
7) Para hacer las preguntas necesitas información útil, así como los focos que iluminan el camino.
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